POR ÉSTA NO PASO

Foto: José Rosales (reven)

Si hoy fuera 28 de diciembre, pensaría que la noticia era una inocentada. Obviando que no me fio ni un pelo de la prensa, si al final, los hechos son tal como los he leído, definitivamente nos hemos vuelto chavetas.

La noticia relataba que la Universidad de Sevilla, contemplaba en su normativa de calificación de las asignaturas, que cuando un estudiante es cazado copiando en un examen, se le permitirá terminar el mismo, y será una comisión formada por tres profesores y tres alumnos, con igualdad de voto, quienes decidan si se le corrige el examen o no.

Si esto es verdad, que paren que me bajo, no puedo con este discurso pseudo progre y liberal de tres al cuarto que pretende descubrir la pólvora de la igualdad, a estas alturas, llegando a unos niveles de permisividad enfermizos.

Contribuyamos a que nuestros jóvenes universitarios se sientan seguros por encima de todo, aunque les pillen chuleta en mano, que siempre tengan el beneficio de la duda. A lo mejor al profesor, ese viejo chiflado que no sabe hacer la “o” con un canuto, se le ha nublado la vista y creyó que estaba copiando, cuando realmente estaba pensando, ayudado de un pequeño guioncito sin importancia. Además, si encima cuenta con el apoyo de tres colegas, la conclusión que alcanzará es que todo vale, el mundo a sus pies, haga lo que haga.

Atrás quedaron los tiempos en que los estudiantes asumíamos el riesgo de ser expulsados de un examen si nos pillaban copiando. Atrás queda la adrenalina generada por jugar con lo prohibido. Sigamos así y crearemos una juventud de cartón piedra, derribable al primer golpe de viento.

No señor, por ésta no paso, apúntenme en las listas de los carcas más recalcitrantes, pero por ésta no paso.

2 comentarios:

Elena dijo...

Este es un buen ejemplo de la tergiversación periodística. Ávidos de ventas, al precio que sea y el fin (vender) justifica los medios, el periodismo actual es cada vez más amarillo y menos honesto. Para ello utilizan el sensacionalismo como instrumento.

Ante una norma sacada de contexto que decía que no se expulsara al alumno de clase cuando se le pillara copiando, que se le dejara terminar el examen sin humillarlo ante sus compañeros, PARA DESPUÉS IMPONERLE EL MERECIDO SUSPENSO, como se ha hecho durante toda la vida de Dios (que así se dice en Andalucía), eso se ha convertido, por obra y gracia de la manipulación sensacionalista, en un circo de tergiversaciones y mentiras.

Y que conste que no soy profesora de la Universidad de Sevilla.
Lo que soy, lo que rechazo es la mentira institucionalizada de un periodismo mentiroso que cada vez abunda más.

ESPERANZA dijo...

pues de la noticia se han hecho eco distintos medios de comunicación de diferentes tendencias. Por eso yo empezaba el post con reservas de la veracidad de la noticia. ¿será tan dificil narran los hechos tal y como suceden?