Como todos los años por estas fechas se preparó para recibirle, ahuecó el vuelo de su falda, alisó los pliegues de su talle y se sentó a esperar su llegada. Evocaba el ímpetu de sus caricias capaces de convertir en naranja su vestido verde para después quitárselo a pequeños jirones, dejándole el cuerpo desnudo a su merced, pero esta vez era distinto, el tiempo pasaba y él no llegaba. Fue perdiendo pedacitos verdes por la angustia de la ausencia mientras los rayos de sol le lanzaban pinceladas amarillas. Y llegó el frio y el bosque seguía de manga corta, esperándole, pero el otoño no acudió a su cita, tan solo unas nubes naranjas que atravesaban el cielo como un reguero de hojas dejaban su estela bajo la atenta mirada de una incipiente luna nueva.
SENSATA LOCURA
Desde que se levantaba por la mañana la lentitud de la prisa la acompañaba. Se quitaba los tacones y el maquillaje, se ponía el pijama y las zapatillas, bajaba los peldaños pares de las escaleras y salía de casa corriendo despacio a la calle. Se incorporaba al trabajo a la hora de salir y descansaba duramente toda la jornada. Al final del día desayunaba tranquilamente con su peor amigo mientras volvía trotando a casa. Subía los peldaños impares de las escaleras, abría la puerta de su casa en la planta baja, se ponía los tacones y el traje de ejecutiva y se sentaba nerviosamente a ver la tele. Así día tras día, año tras año, vida tras vida, hasta que se plantó y poco a poco se fue convirtiendo en flor.
(De vez en cuando una se regala una dosis de locura para soltar tensiones y liberar ternuras)
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MALA SUERTE
Lo tenía decidido: tomó una soga, se subió al caballo y se dirigió al bosque en busca de ese roble bajo el que había vivido tantas tardes de amor. Mientras se colocaba la soga alrededor del cuello y la ataba a la rama, miraba el tatuaje con sus nombres y un corazón grabado en el tronco. Pinchó la grupa del caballo y éste salió despedido dejándole colgado de la rama. Tras unos segundos de ahogo, ésta quebró y él cayó al suelo. Lo intentó una segunda, una tercera y una quinta vez, con igual tino, ya no tenía donde colgarse. Maldijo su suerte como tantas otras veces: la mujer de su vida se casó con otro; le despidieron del trabajo por falta de eficacia y le acababan de desahuciar por no pagar el alquiler.
¡Quién sabe! ¡A lo mejor el cuarto intento hubiera sido el bueno!
¡Quién sabe! ¡A lo mejor el cuarto intento hubiera sido el bueno!
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OJALÁ
Melissa Morano B
Me pierdo entre los periódicos digitales buscando unos instantes de descanso en medio de la vorágine diaria y lo que encuentro son escenas muy nítidas de mi niñez: las miradas de reojo hacia el teléfono implorándole que no sonara para darme la mala noticia que tanto temía; mi madre escondida tras los visillos esperando un día tras otro la llegada de mi padre; el descanso de mis músculos cuando le oía meter la llave en la cerradura; el coche oficial al que no nos dejaba ni acercarnos. Vuelven esos días salpicados por el miedo cuando leo que la banda terrorista abandona las armas, ojalá pudiera borrar ese amargo recuerdo, ojalá pudieran volver todos los que se llevaron, ojalá no hubiera pasado nunca, ojalá no vuelva a ocurrir jamás.
(Llevaba tiempo buscando este video y por fin lo encontré, es una canción de Tontxu que retrata muy bien la situación)
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El ReClato de esta semana
muereboriz
VOLVER A EMPEZAR
No pudo evitar mirar de reojo la puerta del apartamento cuando el azar la llevo hasta allí cincuenta años después. Entre esas cuatro paredes desplegó los sueños que trajo en la maleta cuando se vino del pueblo, esos que luego se fueron desinflando y quedando por el camino y ese amor de juventud para toda la vida que duró dos primaveras. Ya estaba a punto de bajar las escaleras cuando retrocedió y decidió llamar al timbre. Le abrió la joven que había sido, miró de arriba abajo a la anciana y le preguntó - ¿Qué desea?- Ella sin dudarlo contestó -Una segunda oportunidad -
(Este ha sido el intento de esta semana, seguiremos insistiendo en las próximas)
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BARBECHO
oloramandarina
Corren tiempos de sequía, por más que estrujo el papel no consigo sacar de él ni una gota de tinta que dibuje una palabra. Me sobran tantas excusas como ideas me faltan y por más que exploro para descubrir ese rincón secreto donde duermen las letras que esperan, solo sigue habiendo una hoja en blanco.
Quiero creer que estoy en tiempo de barbecho no que mis palabras se han marchitado antes de nacer ni que ya no tengo nada que contar.
Sigo regando cada noche mi ilusión para que las musas vuelvan a mi lado, incluso les he prometido un chocolate con churros si regresan o un bocadillo de calamares, si lo prefieren, aunque esto no deja de ser el principio de la corrupción, pero es que tengo tantas ganas de escribir…
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EL ESLABÓN PERDIDO
Siempre pensó que las puñetas le investían de un halo divino, por eso las lleva sobre la toga y cuando no la viste, las lleva ocultas en las mangas de sus trajes, el caso es no bajarse nunca del estrado.
- Saque las manos de los bolsillos – reprende a un testigo.
- Póngase derecho – increpa a otro
-Si celebramos el juicio, le voy a fundir, así que llegue usted a un acuerdo – presiona al letrado.
En la soledad de su despacho entabla línea directa con Dios con el que intercambia impresiones sobre los pleitos, luego entra en trance tocado por esa inspiración divina y dicta sentencias grotescas, absurdas, de difícil lectura y peor comprensión.
Sin duda es víctima de las interferencias. Él convencido de estar en contacto con el Sumo Hacedor y con quien ha comunicado es con un guasón de Badajoz que se lo está pasando pipa a su costa y que, llegado el caso, no tendrá ningún reparo para mandarle a hacer puñetas.
El de Badajoz se estará partiendo de risa pero a los demás nos resulta difícil contener las lágrimas.
SORTIJAS DE MICROJUSTAS
Lo reconozco, soy una escritura compulsiva, mi cabeza esta llena de palabras que salen por mis dedos y se estrellan contra la pantalla del ordenador, a veces consigo reagruparlas con arte y otras son ellas las que me advierten del desastre.
Esta ha sido mi contribución a la puja por la sortija de las microjustas literarias,ha sido muy divertido, aunque al principio, iba todo tan rápido que era difícil meter un micro hasta de canto. Algunos son buenos (creo), otros son malos y otros son peores. Aquí os los dejo.
1. INTUICIÓN
- Me lo temía - dijo chapoteando en horchata tras rebanarle el gaznate.
2. APAÑO
Le compró una sortija, le regalo un ramo de flores y le imploró: - Cásate con mi hijo, yo procuraré que no te falte de nada -
3. SOSPECHA
Se sentía perseguido, quería pensar que tal vez era su sombra, un simple reflejo. Cuando saltó por la ventana y su reflejo se quedó apoyado en el alfeizar, confirmó sus sospechas.
4. LA GRAN MANZANA
Llegó con unos cuantos dólares en el bolsillo y un gran proyecto en la cabeza. Volvió con la cabeza en un bolsillo y un proyecto de unos cuantos dólares.
5. TORRE DE BABEL
Utilizaban la misma lengua pero no hablaban el mismo idioma, por eso las palabras, muy dignas, se fueron en busca de un lugar donde poder demostrar lo que eran capaces de hacer.
6. OMISION
No participé en la contienda, solo estaba allí; tampoco intervine en el linchamiento, solo lo presencié; no sé porque ahora me buscan por asesinato si yo no hice nada de nada.
7. ANGUSTIA VITAL
Después de perder la mañana, me asomé a la ventana y vi caer la tarde, se estrelló contra la acera y no pude hacer nada por evitarlo. Entonces se acabaron los días de perros y empezaron las noches en blanco.
8. LA TRISTEZA DEL DRAGON
Con esta depresión no era ni su sombra, el fuego de la pasión le había abandonado, cada vez que abría la boca solo le salía baba. De rugir ya ni hablamos.
9. LA POLÍTICA
Bien vestida, bien hablada, exageradamente interesada y tremendamente deteriorada.
10. EL FUTURO
Fui seducida por su poderoso magnetismo, le confié mis sueños y mis ilusiones, hasta que el presente harto de mi indiferencia cogió la maleta y me abandonó, el impostor se esfumó y a mi no me quedó más remedio que volver a nacer.
11. ECLIPSE
No faltaba ni un amanecer a la cita, cuando los primeros rayos del sol acariciaban el lago ella se mostraba entre sus aguas regalándole su sonrisa. Aquel día no pudo soportar su ausencia y se lanzó al agua a buscarla. Ella sigue asomándose cada amanecer esperándole, ya no sonríe.
12. PARADOJA
Le gustaba pasear por la cuerda floja, simular que estaba a punto de caerse para arrancar el grito del público, bromear con el equilibrio sabiendo que era su aliado en la carpa. Fuera de ella no tenía el gusto de conocerlo.
13. MUSAS INFIELES
Gritó pidiendo auxilio pero no vinieron en su ayuda. El papel amarillea y la tinta de la pluma se está secando mientras ellas se entregan al placer de otros cuentistas.
14. INDIGNADOS
Se sentía un orgulloso ciudadano depositando su voto y decidiendo quien quería que le gobernara hasta que vio que con su papeleta unos jugaban al monopoly y otros hacían barquitos de papel echando a la deriva sus ilusiones.
15. TEMPUS FUGIT
Tal como éramos nos fuimos y volvimos siendo lo que somos, polvo de nubes, gotas de tierra y briznas de sueños. Mañana seremos las brasas de nuestros recuerdos o tal vez el fuego de nuestros versos.
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OLFATO O CLARIVIDENCIA
La escritora y filósofa Ayn Rand (1905-1982) hizo esta reflexión en 1950. Han pasado 61 años desde entonces y no solo está vigente sino, desgraciadamente, plenamente presente.
"Cuando advierta que para producir necesita obtener autorización de quienes no producen nada; cuando compruebe que el dinero fluye hacia quienes trafican no bienes, sino favores; cuando perciba que muchos se hacen ricos por el soborno y por influencias más que por el trabajo, y que las leyes no lo protegen contra ellos sino, por el contrario, son ellos los que están protegidos contra usted; cuando repare que la corrupción es recompensada y la honradez se convierte en un autosacrificio, entonces podrá afirmar, sin temor a equivocarse, que su sociedad está condenada."
(No he encontrado una imagen que refleje tanto desastre)
CARPE DIEM
carme r
-Son las doce horas, un minuto y quince segundos- si lo dice mi hijo no hay duda, aunque no se lo crea funciona como un reloj suizo, ya desde pequeñito apuntaba maneras y reclamaba su biberón cada tres horas, treinta minutos y catorce segundos. Ahora sigue experimentando con el tiempo, ¿sabe usted? avanza un mes… retrocede un año...va recogiendo recuerdos y anunciando proyectos, ayer, no sé dónde iría pero no trajo nada, cuando llegó se puso como loco a cavar un túnel en el jardín y ahí sigue, llevandose las latas de conserva de la despensa.
(Este fue el intento fallido de ReC de esta semana)
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COLORÍN COLORADO
Cada día me pongo a escribir un cuento con final feliz, pero no es fácil calzar el enorme pie de Cenicienta en su pequeño zapato de cristal, ni tampoco besar a un sapo para convertirle en príncipe.
En cambio es frecuente que me ofrezcan una manzana envenenada o que al doblar la esquina me intente engullir un lobo disfrazado de abuelita. Por eso en mis cuentos los enanos crecen, las brujas no tienen verrugas en la nariz, las princesas abandonan sus palacios y dan esquinazo a sus príncipes, los malos son un poco buenos y los buenos son un poco malos.
Cada noche escribo el final de un cuento feliz, montada en una calabaza que no quiere ser carroza.
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MATER ET FILIUS
Julito, el niño de mi vecina ya lee con dos años, a decir de su madre y eso que sólo emite gruñidos cuando le preguntas cualquier cosa.
Rubén, el del quiosco de periódicos dice no ser pasión de padre mantener que su hija de tres años canta como los ángeles, sordos añadiría yo.
Paloma, mi cuñada, sostiene que su hija Marta es una niña muy sociable a pesar de que en sus cinco años de vida sólo la he visto relacionarse pegando patadas en la espinilla al que osa ser amable con ella.
A la vista de tanta tontería paterno filial hace tiempo que tomé la decisión de no hablar de las excelencias de mis hijos, esas me las guardo para saborearlas a solas y no tener que compartir ni un ápice de su deleite. En cambio hablo abiertamente de sus picias, así dejo de ser el blanco de absurdas comparaciones y consigo que pierdan el interés por mi familia mientras que yo me libero de interesarme por la suya.
CUALQUIER TIEMPO PASADO FUE MEJOR
Landhauts
Hacía treinta años que lucía ese peinado ahuecado y esas blusas abrochadas hasta el cuello. El espejo podía reflejar de memoria su imagen, lo mismo que los cortinones del salón que de tanto cubrir mediodías daban sombra aunque no se la pidieran. Todo seguía igual que ayer e igual que mañana, el tiempo vivía atrapado entre las apolilladas alfombras que cubrían las miserias que un día fueron honores.
Seguía desayunando todas las mañanas con su madre (q.e.p.d.) y comentando con ella los chismes y trapos sucios de la alta y rancia sociedad, a veces le pedía consejo sobre cómo hacerse respetar por el opositor de notarías que la pretendía, era entonces cuando aparecía su padre susurrándole al oído que su pretendiente se casó con otra y hoy era un feliz padre de familia numerosa a punto de jubilarse.
Ella se encaraba con él:
– ¡Mientes!, tiene razón mamá, siempre has sido un Don Nadie, hasta para morirte tuviste mal gusto, ¡qué vergüenza! ¡En brazos de una ramera ¡ -
Todas las noches vuelve a la habitación de su madre para arroparla y desearle felices sueños, luego cierra con llave la puerta para que no se le escape su recuerdo.
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