Hace dos días que no amanece. El Gobierno Central ha
instalado un fuerte dispositivo lumínico que emula la luz solar y los
humanoides producen más que nunca, en cambio nuestros músculos saben que es de noche y se niegan a seguir
trabajando sin descanso.
Ya no nos queda agua,
una botella se cotiza tanto en el mercado negro que solo la pueden adquirir los
dirigentes. Nos han empezado a repartir geles acuosos para hidratarnos, pero cada
vez nos dan menos y vamos cayendo como moscas.
Quieren acabar con nosotros, no somos rentables. Muchos creen
que estamos a salvo mientras siga habiendo un humano en el Triunvirato Estatal que se
preocupe de nosotros. Ayer vino a visitarnos al gueto y cuando se marchó
empezamos a despedirnos en silencio, no hicieron falta palabras para saber que
su mirada hueca y ese ligero eco metálico en su voz, significaba el fin.
Mi apuesta de este mes a ENTC. El tema, pura ciencia ficción: 2084