De corazón y científicamente, me da igual cómo lo mires, pero
la respuesta sigue siendo no. Compréndelo, no puedo aparearme con una máquina y
engendrar un humanoide, pondría en
peligro a mi especie. Además, me da no sé qué retozar con un software con
cuerpo de aluminio y eso que …¡vaya piernas!
¡Qué no! ¡Qué no!
entiéndelo, yo quiero un hijo de carne y hueso que cuando se haga una herida le
salga sangre y no chispas.
¡Qué senos tan turgentes! En fin, todo sea por la evolución tecnológica
de nuestra galaxia, pero… ¡la guarda y custodia te la quedas tú!
8 comentarios:
¡Hay que ver de lo que son capaces algunos hombres por echar un polvete electrizante!El resultado es lo de menos y sin ataduras filiales por supuesto¡que fuerte!.
Besos de gofio.
jajaja, buena apuesta con ese inicio de frase, me gusta, de verdad que ha sido divertido leer este micro en clave de ciencia ficción.
Besitos
Esperanza, arriesgada la propuesta para REC que has enviado, no porque no se entienda, que sí y además con mucho humor, sino porque considero que pocas veces apuestan por relatos de tanta ciencia ficción.
Aún así, me gusta y he disfrutado imaginándome a esos dos en la cama.
Un abrazo, Escritora.
¡Qué bueno! Un hombre y una robotita de buen ver, ¿qué saldrá de esa relación? je je.
Yo ni lo he intentado esta semana; me quedé en blanco y no hubo manera.
Un abrazo, Esperanza.
jajaja. qué bueno, compañera.
has sacado un buen micro de una frase jodida (conperdón)
Muchos besos
Es que la carne...digo...la lata es débil...y la custodia, una lata, también.
Un beso.
¡Qué bueno, Esperanza!
Me has arrancado una carcajada grande mientras me decía, "vaya palo al género masculino".
Un abrazo.
Esperanza, me ha gustado mucho tu micro... y sí, ese cromosoma X que nos pierde. ja, ja, ja
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