EN CAPILLA

Jose Antonio Carretero

Hoy me he regalado un paseo nocturno por Oviedo, que ha despertado esa serenidad que vive sepultada en no se qué sitio escondido de mi interior, y que a determinados estímulos aflora, recordandome que sigue conmigo.


El frio de la noche me acaricia mientras voy paseando por sus calles desiertas, ni un alma por el centro de esta elegante y estirada ciudad y a pesar de ello ninguna sensación de temor me acompaña. Al bajar una calle empinada, veo una coqueta iglesia iluminada, embutida entre dos sobrios edificios, y la curiosidad me llama a atravesar su puerta abierta. Hacía mucho tiempo que no escuchaba con tanta intensidad el ensordecedor sonido del silencio. Algunos sitios de culto estan impregnados de una energía especial y éste, sin duda, es uno de ellos.


Terminado mi paseo me refugio en la soledad de una habitación de hotel, un frio lunes de noviembre y me acurruco en mis palabras para conseguir el calor que le falta a estos sitios, que son casa de todos y hogar de nadie.


Sitios de paso que no llegan a impregnarse de alma, no se si por las altas dosis de lejia que emplean para eliminar cualquier rastro o porque sus ocupantes entran por una puerta y salen por otra.


Miro por la ventana al cielo de la noche asturiana y le pido a La Santina que me acompañe mañana al juicio que me ha traido a esta bellisima ciudad, que se siente con Su Señoria y que le susurre al oido que ye mi cliente quien merez ganar. Como no interceda, estoy perdida.


(no quisieron los duendes que habitan en las redes de internet que anoche publicara este post. A quien le pueda interesar, la Santina escuchó mis plegarias y empujó a la parte contraria a negociar. tras muchas horas de yo pongo, tu quitas, se alcanzó un acuerdo y todos contentos)

5 comentarios:

Beatriz dijo...

Es bueno saber que tienes línea directa con la Santina, nunca se sabe ......., de cualquier manera seguro que buen trabajo.

Besos.

ESPERANZA dijo...

No te creas, yo fui la primera sorprendida, porque ya sabes que mis relaciones con la Iglesia no son precisamente fluidas. A lo mejor por eso le caigo simpática!!!!

Besos

Angel dijo...

El post es muy bonito,meláncolico, otoñal, adecuado, vamos que pega muy bien con la autora y la estación.

Ahora bien, el último párrafo en rojo, es tremendo.¿Santina,plegarias, intercesión?

Ya intuía yo alguna relación entre Vaticano y CGPJ.

Enhorabuena.

Pedro dijo...

Y digo yo, tanto paseo, tanta melancolia, tanta santiña y de la sidra, los preñaos, el pixin..... ¿qué?

ESPERANZA dijo...

Fijate, Angel, que cuando estaba escribiendo lo de encomendarme a la Santina, las plegarias, etc. me acordé de tí. Intuía que la polémica estaba servida.

Pedro, he de decirte que una es una "pofesional" y cuando va a trabajar, no se calza ni un bollu preñao ni una sidra. No hay que darle ninguna excusa al enemigo para que te saque ventaja.

Besos a los dos.

Esperanza