CRÓNICA DE UNA CRISIS




A mi calle le ha salido una esquina y enseguida la ha ocupado  un nuevo mendigo.

A mis manos le han crecido más  dedos para señalar a tanto descuidero,  esos que hurgan en el  cajón  de todos y lo usan como si  fueran único heredero.

A mi barrio se le mueren las tiendas,  le nacen los desahucios, le duelen los parados y le crecen los indignados.

A mi televisión se le suelta el intestino  y cada vez que la enciendo me cuenta un cuento chino.

A mi paciencia le ha dado un síncope,  la cosa pinta muy mal, está en estado terminal.   

Y mientras damos dos pasos para atrás  no dejamos huella al caminar.

Yo escribo, tú denuncias, él canta, ella protesta, nosotros nos quejamos, vosotros os manifestáis, ellos se asustan.

Tan solo si cada uno ocupa su lugar podremos avanzar. 

26 comentarios:

Cabopá dijo...

Me gusta tu indignación, encantada de conocerte, esto es lo que tiene hacerse eco de las convocatorias como la de Miguel, que conoces a gente muy interesante y que escribe mejor...

Comparto todo lo que dices en esta Crónica de una crisis qué nos duele a muchos, entre los que me encuentro...

Besicos

Rosa dijo...

Me uno a tu dolor...
Y me coloco en mi lugar para avanzar.
Besos desde el aire

CDG dijo...

Buenísima esa indignación. Todo un manifiesto de principio a fin.
Besos.

Unknown dijo...

"A mi barrio se le mueren las tiendas, le nacen los desahucios, le duelen los parados y le crecen los indignados". Fantásticas prosopopeyas -tenía ganas de usar esa palabra.
Si escribiéramos mucho sobre nuestra indignación, ¿alentaríamos la verdadera ola del cambio?

Un abrazo.

Puck dijo...

Esa primera frase me ha llegado al alma. Creo que es una imagen perfecta de la crisis.
saludillos

Paloma Hidalgo dijo...

A golpe de imagen consigues que el corazón se encoja. Y eso es indignación en estado puro.

Un abrazo.

Nicolás Jarque dijo...

Esperanza, ¡Excelente! Has hilado una historia con mucho ingenio y con imágenes potentes, en el que te has valido de la personificación de los objetos y sentimientos. Me ha gustado mucho, y a pesar del tema que es más bien dramático, le has dado un sentido del humor que se agradece.

Te felicito.

Un abrazo, Escritora.

Sergio Cossa dijo...

A esa crisis la sufrimos hace diez años en Argentina. Costó millones de empleos y muchas muertes indignadas.
Después la superamos.
España también lo hará.
Pero siempre hay que recordarlo. Porque suele ocurrir que, cuando la mayoría pasa a tener sus bolsillos con dinero, supone que todo está bien. Y nunca es así.

Tu micro cobra vida y ocupa su lugar. Excelente.

Un saludo, Esperanza.

Anita Dinamita dijo...

Ay, Esperanza, hagamos honor a tu nombre y ocupemos nuestro lugar... para avanzar en la vida.
Un abrazo digno!

Elysa dijo...

Para decirte todo lo que me ha gustado, tendría que hacer un copia-pega de todo el texto. Todas las frases son redondas y todas por si solas se sostienen.
Esperanza, muy buena aportación a estos jueves indignados.

Me voy a ocupar mi lugar.

Besitos, muchos

ESPERANZA dijo...

CABOPÁ Bienvenida, estás en tu casa, vuelve cuando quieras.

Esta crisis está siendo dura y lo que nos queda.

Un abrazo,

ESPERANZA dijo...

ROSA es un buen ejercicio unir nuestras indignaciones y ponerlas a trabajar para que fuercen el cambio que tanto necesitamos.

Un abrazote,

ESPERANZA dijo...

CDG eso pretendía que fuera un manifiesto, si lo he conseguido pues mira que bien.

Un abrazo,

ESPERANZA dijo...

ADRIAN ¡que bonita palabra la de prosopopeya!

Si nuestra indignación fuera sincera, el cambio se produciría,aunque fuera poco a poco.

Un abrazo,

ESPERANZA dijo...

PUCK eso pretendía, dar una imagen lo más real posible de la crisis.

Un abrazo,

ESPERANZA dijo...

PALOMA lo mío es indignación pura y dura si además he conseguido trasmitirla, mejor que mejor.

Un abrazo,

ESPERANZA dijo...

NICOLÁS me alegro de que te haya gustado.

Un abrazo, Escritor

ESPERANZA dijo...

SERGIO COSSA, buena reflexión me aportas, recordar sí, para que no vuelva a pasar, a ver si de resultas de esta crisis aprendemos de una vez por todas que el dinero no es el Dios que habíamos esperado.

Un abrazo,

ESPERANZA dijo...

ANITA mi nombre da mucho juego, la indignación también, ¡aprovechémosla!

Un abrazo,

ESPERANZA dijo...

ELYSA espero que todas nuestras aportaciones sirvan para cambiar esta realidad que no nos gusta, la indignación es el primer paso.

Muchos besos,

Ana dijo...

Me ha emocionado mucho tu texto, Esperanza.
Un besazo,
Ana

Javier Ximens dijo...

La primera frase me ha gustado mucho: calles que engendran esquinas para aposentar mendigos. La crónica es genial, con esa personalización de la indignación. Y cierto, debemos ocupar nuestro lugar, no dejar que los otros se muevan por nosotros. Qué bien escribes, muchacha.

Arte Pun dijo...

Me gustó tu indignación Esperanza, sobre todo en su salida de la típica que ve todos los problemas en los demás, al menos, llamas a que cada uno ocupe su lugar,... casi nada.

Gracias, un abrazo.

ESPERANZA dijo...

ANA me alegro que te emocione mi indignación, eso es síntoma de que estás muy viva, je,je.

Un abrazo,

ESPERANZA dijo...

XIMENS ¡Quien va a hablar! le dijo la sartén al cazo. Me halaga usted, caballero.

Un abrazo,

ESPERANZA dijo...

ARTE PUN sé que es difícil que cada uno ocupe su lugar, pero es la única manera de salir de esta época negra.

Un abrazo,