CUENTAS PENDIENTES

Landahlaust

Daban las cuatro en el reloj del comedor cuando me levanté a deambular a oscuras por la casa. Me puse las gafas como todas las noches para ver mejor la oscuridad y al doblar la esquina del pasillo me lo encontré.

- ¿Porqué nunca me escribes? – me preguntó

. - No creí que te gustara- respondí

Me quedé quieta esperando su caricia, temiendo su reproche y le vi alejarse perdido en la noche que se escapaba por la ventana. Me acurruqué en mi infancia y cuando los primeros haces de luz chocaron con mi mirada tomé su pluma y empecé: Querido papá…

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Me gusta si señora me gusta.
Pasarlo bien y que esa excursion no estropee mucho el lugarin....jejeje

Torcuato dijo...

¿Por qué creería que no le gustaba?
Bello micro.
Un abrazo, Esperanza

ESPERANZA dijo...

ANGEL sabía que te iba a gustar ¡lo que es conocer bien a alguien! ¿verdad?.

Un abrazo.

TORCUATO la respuesta es porque casi nunca aprobaba lo que hacía, por eso suponía que no le gustaría.

Gracias por pasarte y comentar.

Un abrazo,