CONDENADOS A ENTENDERSE


Dibujo: Maren Yumi



Dicen los sabios espirituales que de quien más aprendemos es de quien más nos hace sufrir. También apuntan que tal vez, ese ser que buscas para que te guíe por la senda de la verdad, tu maestro, esté más cerca de ti de lo que crees y finalmente resulte ser tu jefe, o ese compañero de trabajo que te hace la vida imposible o tu suegra, que te complica a cada paso la existencia. Difícil de aceptar ¿verdad?Lo cierto es que la vida, en ocasiones, pone en tu camino personas, de las que no te puedes librar y con las que tropiezas constantemente, creando cada vez más resistencias y más rechazo.

A veces quedas atrapada en un bucle creado por una situación que no sabes o no puedes resolver.

Yo, como fiel seguidora y amante de la palabra, recurro al diálogo como solución de conflictos, pero no siempre es eficaz, y el desánimo se instala en mi cuando descubro que mis palabras no sólo penetran en el corazón de mi interlocutor sino que producen el “efecto espejo” y vuelven a mi, rebotadas, engordadas, mal interpretadas y sin dejar la mínima huella en el contrario.


Por lo menos lo he intentado, no estoy obligada a más. Me gustaría que fuera de otra manera, pero es lo que hay. Si me dieran a elegir hubiera escogido otro maestro, pero hay que reconocer que con éste, recibo clases intensivas y estoy próxima a alcanzar el post-grado.

4 comentarios:

Beatriz dijo...

Cuanta razón tienes, pero afortunadamente si hay bastantes personas que saben interpretar perfectamente las palabras, yo que tú dejaria definitivamente las clases intensivas o al maestro ...............

Besos.
(yo estuve aquí)

ESPERANZA dijo...

Si pudiera!!! pero fijate en el título "condenados a entenderse", no me queda más remedio que bregar con ello, si pudiera quitarlo de mi vida lo haría, no lo dudes, pero entra dentro del pack.

Besos y gracias por estar aqui.

Ángel dijo...

Así me gusta, animación.....

A ver, la condena tiene categoría de negatividad. El entendimiento, no, siempre es positivo. Añade claridad, despeja incertidumbre.

¿Condenados a entenderse? Deseo que sepas transformar ese aprendizaje que llevas, en mejores argumentos que "mellen" la voluntad del contrario.

Y si nó, como dice mi amiga, aquí estamos...

ESPERANZA dijo...

Si, si, pero no hay peor sordo que el que no quiere oir, y a veces por mucho que lo intentes, no puedes cambiar la situación y no te queda más remedio que vivirla como viene.

Además.....¡dejarme que, de vez en cuando me desahogue!!!!! ¡que yo también tengo días grises!

Lo dicho, gracias por estar aqui.

Besos,